Aliados en la lactancia

¡Ay la lactancia! Se que esta opinión igual no es compartida, pero que dura es, especialmente al principio. Noches sin dormir, pechos doloridos, pezones agrietados, hasta con sangre en ocasiones, preocupación por saber si estará comiendo suficiente, si lo estás haciendo bien, si hay leche suficiente. Creo que es una gran desconocida y que hay que dar visibilidad ayudar y compartir conocimientos.

Pero sin duda, también lo más beneficioso. Cubre las necesidades del bebé, favorece el vínculo, ayuda al crecimiento y desarrollo intelectual, reduce el riesgo de enfermedades respiratorias y la otitis, previene la diabetes y la obesidad, ayuda al sistema inmunológico, a perder peso la madre… ¡Y podría seguir!

Ya sabéis los que me seguís que he sido madre hace poco. Os comparto algunos de los que han sido mis grandes aliados durante este tiempo, por si os son de ayuda a vosotras.

El cojín de lactancia. Vas a pasar muchas horas dando el pecho al bebé. Asi que nada mejor que estar cómoda para poder darlo. El cojín se pone debajo del pecho y ayuda a mantener la espalda en buena posición, con los brazos descansados, mientras se dan las tomas.

Los primeros días son especialmente duros. Es cómo cuando te pones tu zapato favorito al principio del verano, te puede hacer rozaduras por falta de uso. Es tu talla y te viene bien, pero el pie no está acostumbrado. Lo mismo pasa con el pecho. Estar muchas horas de repente con el bebé en el pecho puede irritar, agrietar e incluso hacer sangrar los pezones. Pero el bebé tiene que seguir comiendo… Las pezoneras te pueden salvar estas tomas y hacerlas menos dolorosas mientras se repara la zona.

Crema con lanolina. Existen muchas marcas, pongo esta por que es la más conocida, ojo, que no digo que sea la mejor. Ayuda a aliviar la sequedad y las posibles grietas en el pezón. Además no es necesario retirarla o limpiar la zona entre toma y toma. También se puede usar un poco de leche materna de la misma manera.

Multi-mam compresas. Para mi fueron mano de santo. Ayudan con la inflamación y la sensibilidad, favoreciendo el proceso de curación. Su sensación de frescor proporciona un alivio inmediato. Tampoco es necesario limpiar la zona entre toma y toma.

Extractor eléctrico. Existen también muchas marcas. Es una herramienta ideal para aumentar la producción de leche y más adelante, poder extraerse la leche para darla en el biberón.

Por último, y para mi el más importante de todos, la ayuda del papá. Porque es verdad que el pecho lo damos nosotras y tenemos que levantarnos cada 2 horas en muchas ocasiones, pero el padre puede ayudar con los gases, a dormir al bebé, a cambiarlo, bañarlo y un largo etc. De esta forma la mamá puede descansar un poco, que lo va a necesitar.

En mi caso estuve muy bien aconsejada, asesorada y supervisada tanto por las matronas del Hospital Puerta del Mar, en Cádiz, como por la de mi Centro de Salud. Es increíble la dedicación que tienen, lo profesionales que son y lo mucho que pueden ayudar. Pero en caso de tener dudas y no poder resolverlas, siempre es conveniente acudir a un experto.

Para acabar, recalcar que existe también la opción de no dar el pecho y es tan válida como otra cualquiera. Es una decisión personal e individual y no debemos juzgar ni demonizar a quien lo haga.

Espero haberos servido de ayuda 😉